El Coronavirus o Covid 19 llegó a Colombia en marzo del 2020, cambiando la vida de los
niños, jóvenes, adultos y adultos mayores. El tiempo para muchos se pauso. Iniciaron las
clases virtuales, las terapias psicológicas virtuales, todos los eventos eran virtuales, no se
podía salir, el uso del tapabocas y el gel antibacterial era de carácter obligatorio y la
presencialidad pasó a un segundo plano.
Cruz Gonzáles, Estefanía Graciano y Juan Guillermo Valenzuela, tres ciudadanos que con
la llegada del COVID-19 a Colombia sus vidas cambiaron por completo.
Mi nombre es Cruz Elena, hoy es lunes y trabajo desde casa, soy madre, soy esposa, soy
hija, hermana y aparte de todas estas cosas soy agente de viajes. Llevo 28 años laborando
en el sector del turismo, uno de los sectores más afectados por la pandemia. No puedo
atender al público de manera presencial, mis clientes se encuentran enojados, frustrados y
desesperados porque no pueden viajar. Muchos de ellos realizaron la compra de sus planes
vacacionales, viajes de negocio y tiquetes aéreos desde hace meses. Pero los operadores,
hoteles y las aerolíneas me indican que sus vuelos serán cancelados y aplazados no sé por
cuánto tiempo más. Mis clientes le exigen a la empresa reembolsos inmediatos, pero eso no
puede ser posible, porque nadie en este momento se encuentra respondiendo por esta
difícil situación que está atravesando el mundo. Entiendo su enojo, creo que me sentiría
igual si esta fuera mi situación, soló respiro profundo, limpio mis lágrimas y continuó
validando de qué manera puedo ayudarles. En la empresa muchos fueron despedidos,
porque claramente la agencia no estaba en la capacidad de tener a muchos empleados
cuando la situación del país en este momento es lamentable. En la sede principal de Aviatur
Medellín sólo quedamos 12 personas y todas estamos trabajando desde casa. Mi salud
mental se encuentra deteriorada, todos los días lloro, la convivencia con mis hijos no es la
mejor, y mi situación económica tampoco es la mejor, me bajaron el sueldo.
Afortunadamente por el convenio que tiene la empresa con los bancos dejaron congeladas
las deudas hasta que nos vuelvan a subir el sueldo. Sólo espero de todo corazón que todo
esto que estamos atravesando mejore para todos. En las mañanas me levanto, hago
desayuno para mis hijos y para mí, me siento en el computador, estoy pendiente del correo
y del celular corporativo. Les ayudo a mis hijos con las actividades y tareas que les ponen.
Sé que para ellos todo esto no ha sido fácil, estar lejos de sus amigos, del colegio, de los
profesores, de sus planes diarios. Trato también de entender su situación. Al medio día
hago almuerzo, almorzamos juntos y continuo con mis labores. A las 06:00 pm termina mi
horario laboral, pero me levanto del puesto a hacer comida, y a organizar un poquito la
casa. Así son mis días desde que trabajo desde casa, mi vida no es la misma, trato de
entender con los días que esta situación mejorará. Algún día estaré desde la oficina
nuevamente haciendo lo que me gusta.

Lo invitamos a leer: ¿Cómo ha afectado la pandemia al turismo del país? https://www.semana.com/nacion/articulo/coronavirus-en-colombia-como-ha-afectado-la-pandemia-al-turismo-del-pais/681115/

Soy Estefanía Graciano, soy psicóloga y durante todos estos meses de la Pandemia decidí
postularme como psicóloga a la línea de atención para emergencias psicológicas. Es un
trabajo netamente de vocación, no me pagan por esto. Decidí unirme a esta bonita labor,
porque las cifras de suicidios y del deterioro mental generado por todo este caos ha sido
demasiado grande, no solo en la ciudad, en el país y en el mundo entero.
Una de los retos más difíciles de mi trabajo, considero yo, no es una atención con un buen
acompañamiento, las personas llaman, yo los escucho, soy mis respectivas apreciaciones y
les dejo mi numero por si se quieren comunicar nuevamente, pero en todos estos meses
que llevo solo los escucho una vez y no me vuelven a llamar. Sé que no es fácil
desahogarse, y sentir que los pueden escuchar sin ser juzgados. La pandemia me ha
dejado un mensaje muy claro y es que luchar por nuestra salud mental nunca va a estar
mal, muchas personas continúan con muchos mitos sobre el tema, que ir al psicólogo es
para las personas que se encuentran medicadas o que están al borde del colapso y no es
así. Ir a terapia es para todos, si te sientes bien, si no te sientes bien. Cuidar la salud mental
es algo fundamental. Para nosotros como profesionales en este sector, también nos hemos
visto bastante afectados, porque somos quienes escuchan, pero a nosotros quien nos
escucha?
Mis días inician con un café bien cargado, con toda la energía. Soy una persona muy
positiva, muy alegre y creo en que todo esto que estamos viviendo nos está enseñando
muchas cosas bonitas, a pesar de la situación ser tan complicada para todos.
Mis mañanas pasan muy rápido, escucho a muchas personas, todo tipo de personas,
adultos, niños, jóvenes. Aquí es donde entiendo que la carrera que estudie consiste en
tener vocación definitivamente. Escucho llamadas en la mañana, al mediodía almuerzo con
mi madre y en el transcurso de la tarde escuchó y conversó con muchas personas, que
toman la valentía de pensar que poder tener una terapia psicológica es para “locos”, como
lo mencionan las personas que desconocen todo sobre este tema tan importante como lo es
la salud mental. Mi turno termina y descanso, aunque en ocasiones no dejó de pensar en lo
que escuche en las llamadas que atendí, son tantas cosas, tantas situaciones, tantos
problemas. Sin embargo, duermo y al otro día sé que me levantaré con la mejor actitud para
continuar con mi labor.
El Covid 19 nos deja una gran reflexión y es a ponerse en el lugar del otro, a ser más
empáticos. Porque yo puedo contar en ocasiones con los recursos, pero tengo amigos,
familiares, compañeros o conocidos que no cuentan con la misma suerte.

Consulte aquí: Las Líneas de atención en salud mental en Medellín y Antioquia. https://www.eltiempo.com/colombia/medellin/las-lineas-de-atencion-en-salud-mental-en-medellin-y-antioquia-738614

Mi nombre es Juan Guillermo Valenzuela, soy estudiante de medicina. Inicie la carrera hace
poco, tengo 16 años y estoy en primer semestre, estudió en la Universidad del Sinú,
seccional Cartagena. En este tiempo que llevo estudiando he podido percibir que la carrera
se construye en compañía y en equipo, contar con un buen equipo de trabajo es
fundamental. El área de la salud cuenta con un ambiente pesado y muy hostil, las
exigencias cada vez son mayores y considero que como estudiantes nos preparan para
algún día tener que lidiar con algo tan difícil como ha sido la pandemia, trabajar en
urgencias y día a día ayudar a pacientes que llegan con todo tipo de enfermedades.
La universidad ha sido muy clara con el tema de más allá de cuidar la salud física de un
paciente es cuidar su salud mental, porque también hemos percibido que se trata en
ocasiones de enfermedades mentales o desgastes mentales que son los que llevan a los
pacientes a generar enfermedades físicas. En mi universidad varios estudiantes se han
suicidado, por la presión de la carrera y el desgaste que genera estudiar este tipo de
carreras, por eso constantemente la universidad realiza charlas y asesorías respecto a este
tema tan fundamental y más aún en este tiempo de pandemia. Mis días son monótonos, me
levanto, me baño y me alisto para las clases virtuales, la mayoría de mis clases en la
semana inician a las 06:00 am, no me gusta mucho la virtualidad, no es igual estudiar la
carrera de manera presencial que virtual, me hacen falta mis compañeros, los profesores y
poder vivir esta carrera como debe ser, con teoría pero con muchos encuentros
presenciales. A las 10:00 am desayuno y descanso un rato, desde que estudio virtual he
visto muchas series y películas. Mis clases continúan por la mañana. A las 12:00 pm
almuerzo y duermo un rato, a las 02:00 pm continuo con las clases y así se pasan mis días.
Siendo todos muy similares.

Lo invitamos a ver: Clases virtuales en colegios y universidades por el COVID 19. https://cnnespanol.cnn.com/2020/12/23/de-la-educacion-presencial-a-la-virtual-los-desafios-para-los-estudiantes-debido-a-la-pandemia/

Tres historias que nos cuentan desde su lado de los hechos como vivieron la pandemia,
siendo estudiantes, trabajadores y seres humanos que luchan diariamente por cuidar y
proteger su salud mental durante el encierro provocado por el Covid 19.

Lo invitamos a escuchar:

¡Acabo de publicar el primer episodio de mi nuevo podcast! Escúchalo en Spotify for Podcasters: https://anchor.fm/macamy-msica/episodes/Mitos-y-realidades-sobre-los-Trastornos-Mentales-e2b1cs2